Los murciélagos y la transmisión de enfermedades

Un estudio realizado por un grupo internacional de científicos ha comprobado que los murciélagos son portadores de casi todos los géneros de la familia de los paramixovirus, responsables de enfermedades infecciosas que afectan a los seres humanos como el sarampión, la neumonía, las paperas, la gripe o la encefalitis.

Estos mamíferos, según los investigadores, son los principales transmisores de estas patologías y el origen de la infección que las causa, y podrían ser el reservorio de algunos paramixovirus que por sus características genéticas se creía que eran propios de los seres humanos.

Para llevar a cabo la investigación, que ha identificado 60 nuevas especies de virus que afectan tanto al hombre como a los animales- los científicos analizaron 10.000 muestras de animales -sangre y órganos-, en las que observaron la presencia de una gran diversidad genética de paramixovirus en todas las especies conocidas de murciélagos del mundo, por lo que concluyen que estos quirópteros son portadores de los virus desde hace miles de años, y que los agentes infecciosos han podido evolucionar en los murciélagos durante todo este tiempo.

Coronavirus: ¿Por qué los murciélagos son considerador posibles transmisores?

Si bien, todavía no se tiene la certeza de que un animal haya sido el vector del brote de coronavirus que surgió en la ciudad china de Wuhan, todas las miradas apuntan al murciélago.

Estos animales -los únicos mamíferos capaces de volar- ya habían sido el origen de otras epidemias.

A comienzos de este siglo, fueron causantes de la transmisión del síndrome respiratorio agudo severo, más conocido como SARS, que infectó a más de 8.000 personas, 800 de las cuales fallecieron.

A mediados de la década de 2010 fueron el origen de otra enfermedad respiratoria similar al SARS: el Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS por sus siglas en inglés), que afectó a menos gente (unas 2.500) pero fue más letal, matando a más de 850 personas.

En cuanto a este nuevo coronavirus, las autoridades chinas creen que se originó en un mercado de Wuhan que vendía mariscos y carne de animales salvajes, incluyendo a murciélagos y víboras.